Alfabeto de la arcilla

¿Cúal es el alfabeto de la arcilla?

Nos damos cuenta qué, si la arcilla puede pasar de textura dura a polvo y de polvo a pintura en cuestión de segundos,  un alfabeto se esconde en ella. 
Un alfabeto que expresa transformación, flexibilidad, movimiento, simbiosis y variedad. Las diferentes especificidades del alfabeto dan lenguaje y orientan los procesos pedagógicos situados en este espacio y en el encuentro con la arcilla.
 

La arcilla es suave -Alejandro

Se mueve y se queda quieta -Samara

Deja huellas – Joaquín

Da vida – Samara

Se alarga y se achica – Jonael

Se parte, se rompe -Samara

Cambia de tamaños – Jonael

Nos deja trazar y dibujar – Olivia
A medida que trabajamos en el alfabeto, notamos que, en ausencia de agua, la arcilla pasa por otro proceso de transformación.

Pasa a un estado seco, de textura dura, difícil de moldear.

Usamos morteros para crear un encuentro diferente: trituramos la arcilla seca.

Cuando la arcilla no se relaciona con el agua, se seca completamente.

Usamos morteros, haciendo movimientos circulares con el maso y presionando nuestras manos. Poco a poco la arcilla se quiebra.

Nuestras manos sienten y tocan la arcilla mientras se convierte en polvo.

Observamos su “polvosidad” y la forma en que se mueve y fluye a través del espacio.

Poco a poco nos damos cuenta qué frente a nosotros tenemos una gran diversidad de colores; colores que son más vistosos por su textura polvorienta.

Crear el polvo de arcilla toma mucho tiempo y perdemos conciencia del pasar del tiempo. Trabajamos  con paciencia hasta tener mucho polvo de colores, cuidando de que no se vuele con el viento. Descubrimos una textura completamente nueva de la arcilla. 

Ahora que la arcilla está hecha polvo, puede sentir más sus colores – Alejandro

Al crear colores somos parte de la historia milenaria del color y la pintura.

Seguimos rastreando las transformaciones dinámicas que encarna la arcilla. Sentimos las emociones que surgen al crear colectivamente algo nuevo.

Nombramos cada colores, con referencia a diferentes texturas y sabores.

En este proceso altamente colectivo, todos disminuimos la velocidad juntos, deteniéndonos para observar, oler, tocar cada color de la arcilla.

COLOR ESTRELLITA/ TEXTURA SUAVE Y PEGAJOSA / SABOR A GUANÁBANA

COLOR ROSADITO /
TEXTURA SUAVE Y PAPELOSA / SABOR A SANDÍA

+

COLOR ANILLITO ARÁNDANO /
TEXTURA GRANITO / SABOR A NARANJILLA

COLOR CENIZA /
TEXTURA MIGOSA / SABOR A FRESA

COLOR LUPITO/
TEXTURA POLVO / SABOR A CHOCOLATE

COLOR ROMPOPE /
TEXTURA
SUAVE / SABOR A GALLETA

COLOR MIGUITA BLANQUITA /
TEXTURA SUAVE CON MIGAS DE PAN / SABOR A CHOCOLATE

COLOR COCOA / TEXTURA DURA CON MIGAS GRANDES / SABOR A NARANJILLA

COLOR PIÑA /
TEXTURA PIEDROSA / SABOR A PIÑA

COLOR FLORCITA / TEXTURA
SUAVE Y DURA / SABOR A FRESA

COLOR MIGUITA ROJIZA / TEXTURA SUAVE Y ARENOSA / SABOR A ARÁNDANOS

Al crear nombres para los colores de arcilla nos detenemos aún más en el tiempo y nos preguntamos qué historias se esconden  en los colores. 
Pensamos en los colores como un fenómeno perceptivo, y así participamos en una creación cultural.

HISTORIAS DE  LOS COLORES   DE  ARCILLA

Mientras nos detenemos a observar los colores de arcilla, decidimos que cada color debe tener una historia que se esconda detrás.

¿Cúal es la historia que cuenta cada color de arcilla?

Cada niño cuenta una historia que nos transporta en el tiempo, hacia el pasado y el futuro.

El color parece sostener y desbloquear nuestro pasado como si fuera un portador de memoria que involucra nuestro presente y future. 

COLOR ROMPOPE

El color rompope cuenta la historia de las manos, de la forma que tienen –Joaquín.

El color rompope cuenta la historia de las letras –Jonael

COLOR  CENIZA

Había una vez el color ceniza que creó los volcanes, y cuando ellas erupcionaban el color ceniza salía y todos le podían ver – Olivia

El color ceniza cuenta la historia de los volcanes – Olivia

Si el color ceniza se junta con el anillito arándano cuentan la historia de los terremotos –Alejandro.

COLOR  ROSADITO

El color rosadito cuenta la historia del universo.
A través de estas ideas pensamos en cómo el universo se baña en un mar de luz que
se ve y no se ve, antiguo y nuevo.

Todos los planetas, la luna y el sol se formaron por el color rosadito. Mira aquí todos están juntos en el universo porque el color rosadito les juntó –Joaquín.

COLOR  PIÑA

Los colores asignan el poder de contar las historias entrelazadas de humanos y animales.
El color piña cuenta la historia de las huellas.

Había una vez una huella de cerdo que se encontró con huellas de otros animales y de humanos. El color piña permitió que se formen todas las huellas, las de cerdo, vaca, pájaro, caballo, hormigas y más – Samara.

COLOR MIGUITA BLANQUITA

El color miguita blanquita cuenta la historia de cómo le ayuda a romper los huevitos a la patita – Sander

COLOR  COCOA

El color cocoa cuenta la historia de los temblores.

Los temblores pasan cuando la tierra se mueve muy rápido, y fue ahí donde el color cocoa hace que se mueva la tierra y él les creo a los temblores —Alejandro

A medida que continuamos creando historias de los colores de arcilla, decidimos crear un diario de la arcilla donde escribimos sus historias, colores, formas y relaciones. 

Los colores de la arcilla cuentan la historia de cómo la arcilla cambia de formas, y se transforma en muchas cosas Samara.

Este diario me ayuda a acordarme todo lo que la arcilla nos ha enseñado –Samara.
Podré escribir y dibujar todo sobre la señora arcilla – Olivia.

Mientras dibujo con los colores de arcilla me puedo seguir transformando en ella –Jonael.

Pintar con colores de arcilla se convierte en una experiencia subjetiva de transformación que se concreta a través de las lógicas que ofrece la arcilla.

Los colores de arcilla nos están llevando a descubrir diversas historias, historias que contienen vida, y mucho significado.